EL CINE QUE NOS VIENE

Seis propuestas cinematográficas para el próximo trimestre

por JAVIER COLLANTES

En una imperiosa necesidad de miradas cinematográficas honestas, exentas de recursos narrativos adosados al fuego de artificio, se requiere otra forma de creación fílmica alternativa al denominado cine comercial. Estas seis propuestas pretenden favorecer la experimentación de nuevas sensaciones, vinculadas a un cine más comprometido y valiente, en que predomina una fusión entre arte y creatividad, y que al mismo tiempo genera interés en el espectador ávido de otras historias de mayor calado narrativo.

Padre Nuestro

Una producción de Estados Unidos, con el tono del cine independiente americano, donde el lugar resulta un compromiso del retrato de la ciudad de Nueva York, acompañando el tema de la inmigración ilegal en Norteamérica. Galardonada con el Premio del Jurado en el Festival Sundance de 2007, su historia nos conduce a un joven mexicano que entra ilegalmente en Estados Unidos y llega a Brooklyn para conocer al padre que perdió hace años. Su despertar se produce en un camión, solo y sin pertenencias: un compañero de viaje le ha robado todo para hacerse pasar por él
Con un tono desesperanzador, la película discurre por los parámetros de un relato calmado, sobrio, pero lleno de intensidad, combinándose con la ambigüedad, la identidad hurtada, en un ejercicio condensado hacía el realismo, la tragedia, los sentimientos… en el áspero camino hacía la familia, los recuerdos y el país de los grandes sueños.

El Custodio

Una coproducción entre Argentina, Francia y Alemania. La historia trata de un hombre que trabaja como guardaespaldas de un ministro argentino, siguiéndole a todas partes. Si el ministro sale del coche, él sale del suyo, y así sucesivamente; de este modo se ofrece la fotografía de un hombre atrapado en un mundo que le es ajeno, un hombre que ha dejado de sentir su vida al involucrarse en un trabajo que implica reemplazar la propia vida por la de otro, y que se encuentra al límite de su resistencia.
Con los condicionantes de un cine más reducido en su economía de medios, cuenta con una narrativa especial y un ritmo lo suficientemente ajustado para describirnos una historia concisa pero llena de planos precisos, diálogos esplendidos…; en resumen, una historia bien filmada que utiliza los recursos literarios para trasladarlos a imágenes. A diferencia de las habituales “mentiras” del cine en que intenta encubrirse un guión endeble mediante un buen reparto con un resultado desigual, aquí se muestra lo contrario. El resultado es una película modesta pero llena de emotividad, que desenvuelve miradas con palabras, en un alarde de escritura sobre personajes perdidos, anestesiados, en el fondo perdedores, para cantarnos una emotiva balada seca como el trago amargo de las cosas. El guión, con reminiscencias de la década de los 70, retocar no obstante con mayor acidez problemáticas internas sobre personas sin destino vocacional.

Irina Palm

Una coproducción de Bélgica, Alemania, Luxemburgo, Reino Unido y Francia. Qué se debe decir o añadir de la genial Marianne Faithfull, musa de los Rolling Stones, que con su voz desgastada y la poesía en sus canciones y en sus letras, seduce en su interpretación de este film, de declarado éxito en la Berlinale, con diez minutos de aplausos y una sala que la recibió en pie. A partir de la propia declaración de la Faithfull de que esta película es la traducción de algo tan sencillo como que una madre –o una abuela, en este caso– es capaz de hacer todo por su hijo o por su nieto, cobra sentido este film, cuyo argumento relata la historia de una mujer viuda de cincuenta años que necesita dinero para someter a su nieto enfermo a un tratamiento; después de varios fracasos en su búsqueda de empleo, esta mujer encuentra un trabajo en un sex-shop bajo el seudónimo de Irina Palm.
La mirada sobre peculiares formas de encontrar el amor, también sobre el sentido de la vida, del alcance de la amistad ante una hipocresía provinciana en el lugar donde vive, del sentido de lucha y sacrificio… se flexibiliza desde la perspectiva de quien cree obrar de forma correcta para llegar a un buen punto de partida personal.
La película, que supone la expresa atención al canto entonado por unos personajes con vidas en continuo tránsito, carece de estilismos de moda, y su resultado compone lo mejor de una clase de cine nacido para comprender otros perfiles humanos.

La vida interior de Martín Frost

Paul Auster ha rodado en Portugal la adaptación de su novela The Inner Life of Martin Frost. El protagonista, interpretado por el actor inglés David Thewlis, junto a la actriz Irene Jacob y Sophie Auster, componen una historia en tono de comedia surgida al calor del inicio de El libro de las ilusiones, última novela de Paul Auster. En la película se nos presenta un alter ego del propio escritor, convertido en personaje que se ha pasado años escribiendo una ficción y reclamando un descanso. A mismo tiempo, la historia contiene los condicionantes relativos a un amor impregnado de misterio, gobernado por las leyes narrativas propias de una novela. El carácter de los personajes, creativos a la par que extraños, sugiere lo necesario para entusiasmar o detestar, en una atmósfera en que adquiere trascendencia la íntima soledad de quien se dispone a ver o leer algo del propio Paul Auster. Continuando en la misma línea de componer una pieza literaria para un libro, cuando en realidad también es cine, el propio autor se sumerge en esa fascinante dicotomía del disfrutar entre argumentos para dos idiomas que se complementan, literatura y cine, un mundo de situaciones cotidianas tocadas por su peculiar mano maestra.
A pesar de ciertas críticas negativas que ha recibido la película, sin duda interesará a los interesados en el universo creativo de este autor y también a quienes se sientan atraídos por esa posibilidad de relacionar dos escrituras distintas pero próximas entre sí.
Por su parte, la propia entidad de los intérpretes-personajes condiciona un texto lleno de extrañas reacciones donde magia, crisis creativa y una historia de sentimientos se entremezclan, para definir su propio espacio vital.

Querida Bamako

De nacionalidad española es esta cinta documental de gran fuerza emocional, con argumento de los que dejan huella, ahora que el documental mezclado con narrativa de lenguaje cinematográfico abre la oportunidad de reflexionar sobre los sueños y sus realidades paralelas.
La historia gira alrededor de un joven de Burkina Faso, de su vida en la aldea donde nació, de la vida con sus padres, de su familia y su mujer –Bamako, así llamada por haberla conocido en la capital de Mali-, y de su partida a Europa, instigado por el hambre, en busca de un futuro mejor.
El hecho de ser los directores expertos en temas de inmigración e integración ha favorecido la realización de un producto sólido, con el pulso necesario, crudo y realista, que demanda una temática evidentemente vigente en España y en tantos otros países.
Que en el último Festival de Cine de Valladolid haya sido galardonado otro documental semejante a Querida Bamako hace pensar en la importancia social de este género de cintas, e incluso en sus intensas posibilidades como lenguaje cinematográfico específico.

4 meses, 3 semanas y 2 días

Por primera vez en los sesenta años del festival de Cannes, una película rumana ha ganado la Palma de Oro. La cinta describe la odisea de una joven estudiante en los últimos años del comunismo de Ceaucescu, por ayudar a una amiga embarazada que quiere abortar en un país y en una época donde el aborto es ilegal.
Con una crudeza impresionante, interesante en contenidos y narrativamente sobresaliente, esta producción rumana se apoya en un tratamiento no discursivo de la historia, mostrando de forma concluyente la gravedad del problema abordado mediante una apelación de fondo humano, emocional, con una perspectiva interesante en un tema evidentemente polémico.
La película, que muestra calidad y buen pulso en guión, interpretación y dirección, resulta además interesante por su corrección en aspectos nada formalistas, cuya importancia estriba en cómo contar y tratar una historia carente de los recursos fáciles de otras cinematografías.